La confianza en la publicidad

Dentro de esta vorágine de crisis, ERES, índices de bolsa, cierres, despidos, incertidumbre, cambios, recortes, leyes,... hago una pequeñísima reflexión sobre uno de los aspectos  que a este blog concierne: la publicidad.

¿Está afectando el desánimo generalizado a la confianza en la publicidad? En mi opinión, sí.

Los medios no sólo están saturados de publicidad, sino que día a día, los usuarios confían menos en los mensajes que reciben.

Cansados ya de la manía persecutoria de algunos banners a través del remarketing  y de grandes nombres que fingen en anuncios sensibleros y banales comprender las necesidades del "españolito de a pie", nos encontramos ante una auténtica pérdida de fe en la publicidad.

Una servidora, que está metida en este "mundillo", observa las dos caras de la moneda y cada día ve más clara la necesidad de un cambio. El público quiere mensajes serios para recuperar esa confianza perdida y es por ahí por donde deben ir los anunciantes.

Grandes marcas llevan tiempo luchando contra las marcas blancas que en tiempos de recesión tanto daño les hacen. Pero hay dos marcas en concreto que han dado un paso más allá: se trata de la marca de pan integral Silueta y la firma de cosméticos Olay. 

Ambas han optado por contar con la presencia de presentadoras de informativos para enviar sus mensajes al público.

Y yo me pregunto, ¿por qué ellas precisamente? ¿por qué no han elegido a la  modelo guapísima, estupenda y maravillosa de turno para que todas queramos parecernos a ella?

La explicación que yo encuentro es la intención de "utilizar" caras conocidas sin caer en el juego fácil del famoso de turno (Yobingo y Belén Esteban...), respetadas por su trabajo y, sobre todo, serias. 

Si a alguien se le considera serio es a un presentador de informativos, suponemos (y digo suponemos) que siempre dirán la verdad, pues su objetivo es informar.

Creo que estamos dando ya pequeños pasos hacia una nueva era en la publicidad. El mundo en su totalidad necesita cambios y ,una vez más, la clave está en los usuarios.

Os dejo aquí uno de los anuncios ;)

Ante la crisis... trato al cliente

Ayer tuve una de esas tardes de compras para desestresar que tanto nos gustan a las chicas y ,entre otras tiendas, me pasé por Stradivarius. Mi Stradivarius de siempre.

Me llamó la atención la nueva forma de controlar los probadores. Antes, al igual que el resto de las tiendas de este estilo, te preguntaban el número de prendas y te daban una etiqueta con ese número que tenías que devolver a tu salida. Pues bien, ahora a parte de la dependienta que coloca la ropa que se va dejando, hay otra por la zona de probadores que muy amablemente te pregunta tu nombre y el número de prendas y lo escribe en un espejo que han colocado al lado de cada probador.
La conversación fue más o menos así:

-¡Hola! ¿Cómo te llamas?
-¡Hola! Verónica
¿Cuántas prendas llevas?
-3
-Perfecto, yo me llamo Lucía, cualquier cosa que necesites me dices.

Así que tienes tu perchero personalizado con tu nombre y tu número de prendas para que ellas lo puedan controlar.

Una acción sencilla que añade mucho valor al trato recibido en estas tiendas que (a veces es justo lo que buscamos) se caracteriza por la libertad y la autogestión en tus compras. Al ser tiendas con mucho tráfico, las dependientas se centran más en el orden la tienda que en perseguirte para ver qué quieres. Pero eso se compensa con un trato más personalizado en los probadores que es cuando realmente necesitas su ayuda: darte su opinión, traerte una talla diferente, probar la prenda en otro color,...

Me parece muy buena idea, se han diferenciado un poco más de las 800.000 tiendas que existen como Stradivarius y además, evitamos el gritarnos unas a otras cuando vamos a comprar en grupo y no nos encontramos. Mucho más glamouroso, ¿no creéis?

Campaña Oro Collection de Loewe

Trending topic en Twitter, comentado en todos los periódicos digitales,... hoy el tema del día es la campaña Oro Collection de Loewe. Si lo que buscaban era darle un giro a la marca y dar que hablar, objetivo cumplido.
Sin embargo, tengo mis dudas sobre si el impacto será positivo o no...

Por lo que he leído, la campaña intenta reflejar el nuevo espíritu de Madrid. Pues bien, ¿el grupo de personas que aparece se supone que es la representación de la nueva juventud madrileña? Hace mucho que no piso suelo madrileño pero... ¡permitidme que lo dude!

Ellos mismos lo dicen al principio, Loewe es sinónimo de estilo, clase, elegancia, sofisticación,... y, sinceramente, las raíces negras de la rubia de melena corta, las mechas moradas, las plataformas, los tonos flúor y llevar media cabeza rapada, distan mucho de esos adjetivos.

Además, el contenido del spot carece de profundidad. Podéis escuchar frases como: "es un rollo hacerse mayor", "lo más guay de España que no tienen otros países son las españolas", "Spain is different",... lo hortera de las frases casa perfectamente con la imagen de los que las pronuncian pero... ¿ese se supone que es el espíritu de la juventud española? Por favor, en una situación de crisis como la que estamos atravesando, que pregunten a la juventud real a ver qué problemas le preocupan y qué imagen tienen de España.

En fin, no quiero desviarme del tema, que a lo que vamos es al marketing. Para mi opinión, mantener la imagen de marca y ser consecuente con ella en todo momento es LA CLAVE. Está bien lanzar un mensaje de "nos sabemos adaptar a los nuevos tiempos" pero con estos looks, esa música y esas frases,... no se entiende.

Tengo que decir que lo único que me ha gustado de todo el vídeo es Martín Rivas, creo que es el único que encaja más con la imagen de lo que Loewe significa.

Bien por Loewe si sólo buscaba generar polémica, pero cuidado con los giros que se hacen en una marca consagrada, porque los adeptos a esta pueden no verse identificados y no hay NADA más importante que la fidelidad de un cliente.

Aquí os dejo el vídeo de la promoción para que juzguéis vosotros mismos ;)

Sainbury's y la niña de 3 años

Grande la respuesta del departamento de atención del cliente de la cadena británica de supermercados Sainbury's a una especial petición de una niña.

Lily robinson, de 3 años de edad, escribió una carta con la ayuda de su madre a la cadena para preguntar por qué su famoso pan de tigre se llamaba así, si en realidad parecía una jirafa.

¿Es posible que en todos los años que llevan comercializando el pan solamente se haya dado cuenta la niña?Quizás sea la única que lo ha visto tan claro como para comunicar "su error" a la cadena.

Uno de los trabajadores del departamento de atención al cliente decidió contestar a la niña en tono simpático diciéndole que el pan lo creó un pastelero al que le pareció que el pan tenía forma de tigre pero que, evidentemente, era una tontería. Chris King, que así se llama el trabajador, adjuntó una tarjeta de regalo para que la niña comprase en el supermercado.

Después de esto, la cadena cambió el nombre del pan por "pan de jirafa".

Muy inteligentemente, la cadena hizo público este suceso en su página de Facebook consiguiendo más de 150.000 "Me gusta" y siendo compartido por más de 50.000 usuarios (entre ellos una servidora).

Sin duda, una forma inteligente de aprovechar la ternura de la sugerencia para mejorar la imagen de los supermercados que, dicho sea de paso, ha sido bastante beneficiada. Además, en los tiempos que corren, una noticia que nos despierte una sonrisa es más que bienvenida.